Hola. Hoy os contaré una gran aventura mía y de mis amigos. Era domingo, un día muy soleado, por cierto, mi hermana pequeña, mi vecino Igor, mi otra vecina Nerea y su amiga Ledicia estábamos en el parque de nuestra gran y maravillosa urbanización.
Todos somos vecinos (excepto Ledicia que vino a jugar con nosotros de casualidad a pasar nuestra aventura)
Bueno, a lo que íbamos, jugábamos a nuestro especial y particular juego:
EL SUELO.
En otra entrada os explicaré como se juega :)
Después de 1 hora seguida jugando al juego, estábamos muy cansados y Igor y yo fuimos a mi casa a beber agua.
Por la ventana de la cocina vimos al hermano pequeño de Igor; iba a ir al parque a buscarlo.
Lo llamamos desde casa y dijo que Igor se tenía que ir al cine a ver la película:
El aprendiz de brujo.
(Siempre esta al tanto de las nuevas películas del cine)
Igor se fue y yo volví al parque donde me esperaban Nere, Ledi y mi hermana Jessi.
Cuando llego al parque me encuentro con que solo hay unos niños pequeños y sus padres.
Ni rastro de las demás.
Me senté y utilicé mis 5 sentidos en detectar donde estaban (un día me habían hecho algo parecido).
De pronto escucho unas risas en la parte de atrás de una gran montaña de escombros de carreteras.
Al llegar allí vi a Ledicia, en efectivo estaban allí. Me contaron que se escondían de algo que se movía entre unos matorrales de ortigas.
Tiramos varias piedras, pero no escuchamos nada, maullamos, pero nada.
Fuimos a casa de Nerea a beber agua, se nos ocurrió hacer una de nuestras famosas expediciones al monte.
Con el consentimiento de nuestros padres cogimos a los perros y nos fuimos al monte.
Después de atravesarlo, seguimos por un camino de tierra, acompañados de nuestra amiga Lucía:
Lucía iba en mi clase, pero al cambiarme de colegio, no la ví mas excepto por que sus abuelos viven cerca y a veces queda allí y nos la encontramos (como en el caso de hoy).
Vimos unas ovejas en un prado y nos acercamos. Les dimos hierbas, se estaban acercando pero mi hermana resbaló y se asustaron.
Dejamos a Lucía y seguimos el camino.
En un cruce de calles, Ledicia grita:
- Un perro suelto!!!
Salimos corriendo, perseguidos por el perrazo (un Pastór Alemán).
Pasamos por una casa que tenía el portón abierto, y un Husky Siberiano se encontraba allí, os dejo esta foto:
Era un animal parecido a este.¿ A que es bonito?
Pasamos tan rápido que no pudo reaccionar. Cuando llegamos a la parte de abajo de la cuesta, nos dimos cuenta de que Ledicia faltaba:
- ¿Se la abría comido el Pastor Alemán?
-¿Se habría hecho daño?
-¿Se habría caído?
Todas estas preguntas rondaban por nuestra cabeza y más...
A los pocos minutos vemos aparecer a Ledicia como si nada, le preguntamos:
-¿Qué te pasó?
-Nada, me escondí detrás de una furgoneta y no me vio el Pastór.
Proseguimos el camino y llegamos a una curva, al final de ella siempre había perros sueltos:
-La banda de perros asesinos y otro Pastór más.
Mandamos (Nere y yo) a que Jessica y Ledicia miraran si había perros, pués nosotros no podíamos ir con Dylan y Pancho (Nuestros perros, Dylan el mío y Pancho el de Nere).
Al poco nos vienen con que no sabían bien si estaban o no, Nere le dio su perro a Ledicia, y yo Dylan a Jessica.
Nere y yo fuimos a mirar, estabn los 5 perros pequeños y el Pastór nos era imposible pasar.
Intentamos rodear la casa, pero no pudimos porque había más perros, tampoco podíamos volver estaban el Husky Siberiano y el Pastór Alemán.
Nos adentramos en un bosque que había detrás de la urbanización. (No el mismo que el primero si no otro).
Nos deslizamos detrás de una valla, para meternos en un sitio privado con más árboles dentro.
Abrimos una especie de puerta de plástico media improvisada. Salimos del terreno, y fuimos a parar justo a la urbanización y nos dirigimos al parque a descansar pero estaba un cruce de Doberman:
Tranquilos no tiene la misma actitud, por que es un cruce.
Nos acompañaron a nuestra casa y les contamos la historia.
Llegamos a casa a las 8:39 y salimos al parque a las 4:15.
Pura aventura. :)
Todos somos vecinos (excepto Ledicia que vino a jugar con nosotros de casualidad a pasar nuestra aventura)
Bueno, a lo que íbamos, jugábamos a nuestro especial y particular juego:
EL SUELO.
En otra entrada os explicaré como se juega :)
Después de 1 hora seguida jugando al juego, estábamos muy cansados y Igor y yo fuimos a mi casa a beber agua.
Por la ventana de la cocina vimos al hermano pequeño de Igor; iba a ir al parque a buscarlo.
Lo llamamos desde casa y dijo que Igor se tenía que ir al cine a ver la película:
El aprendiz de brujo.
(Siempre esta al tanto de las nuevas películas del cine)
Igor se fue y yo volví al parque donde me esperaban Nere, Ledi y mi hermana Jessi.
Cuando llego al parque me encuentro con que solo hay unos niños pequeños y sus padres.
Ni rastro de las demás.
Me senté y utilicé mis 5 sentidos en detectar donde estaban (un día me habían hecho algo parecido).
De pronto escucho unas risas en la parte de atrás de una gran montaña de escombros de carreteras.
Al llegar allí vi a Ledicia, en efectivo estaban allí. Me contaron que se escondían de algo que se movía entre unos matorrales de ortigas.
Tiramos varias piedras, pero no escuchamos nada, maullamos, pero nada.
Fuimos a casa de Nerea a beber agua, se nos ocurrió hacer una de nuestras famosas expediciones al monte.
Con el consentimiento de nuestros padres cogimos a los perros y nos fuimos al monte.
Después de atravesarlo, seguimos por un camino de tierra, acompañados de nuestra amiga Lucía:
Lucía iba en mi clase, pero al cambiarme de colegio, no la ví mas excepto por que sus abuelos viven cerca y a veces queda allí y nos la encontramos (como en el caso de hoy).
Vimos unas ovejas en un prado y nos acercamos. Les dimos hierbas, se estaban acercando pero mi hermana resbaló y se asustaron.
Dejamos a Lucía y seguimos el camino.
En un cruce de calles, Ledicia grita:
- Un perro suelto!!!
Salimos corriendo, perseguidos por el perrazo (un Pastór Alemán).
Pasamos por una casa que tenía el portón abierto, y un Husky Siberiano se encontraba allí, os dejo esta foto:
Era un animal parecido a este.¿ A que es bonito?
Pasamos tan rápido que no pudo reaccionar. Cuando llegamos a la parte de abajo de la cuesta, nos dimos cuenta de que Ledicia faltaba:
- ¿Se la abría comido el Pastor Alemán?
-¿Se habría hecho daño?
-¿Se habría caído?
Todas estas preguntas rondaban por nuestra cabeza y más...
A los pocos minutos vemos aparecer a Ledicia como si nada, le preguntamos:
-¿Qué te pasó?
-Nada, me escondí detrás de una furgoneta y no me vio el Pastór.
Proseguimos el camino y llegamos a una curva, al final de ella siempre había perros sueltos:
-La banda de perros asesinos y otro Pastór más.
Mandamos (Nere y yo) a que Jessica y Ledicia miraran si había perros, pués nosotros no podíamos ir con Dylan y Pancho (Nuestros perros, Dylan el mío y Pancho el de Nere).
Al poco nos vienen con que no sabían bien si estaban o no, Nere le dio su perro a Ledicia, y yo Dylan a Jessica.
Nere y yo fuimos a mirar, estabn los 5 perros pequeños y el Pastór nos era imposible pasar.
Intentamos rodear la casa, pero no pudimos porque había más perros, tampoco podíamos volver estaban el Husky Siberiano y el Pastór Alemán.
Nos adentramos en un bosque que había detrás de la urbanización. (No el mismo que el primero si no otro).
Nos deslizamos detrás de una valla, para meternos en un sitio privado con más árboles dentro.
Abrimos una especie de puerta de plástico media improvisada. Salimos del terreno, y fuimos a parar justo a la urbanización y nos dirigimos al parque a descansar pero estaba un cruce de Doberman:
Tranquilos no tiene la misma actitud, por que es un cruce.
Nos acompañaron a nuestra casa y les contamos la historia.
Llegamos a casa a las 8:39 y salimos al parque a las 4:15.
Pura aventura. :)